martes, 19 de abril de 2011

Jaque.

No caer, es el principio primero,
para que intentar volver, ya todo pasó
sabe que somos presente,
Pasar y pisar, no solo un caminar
es el único andar.
No fuerces tu suerte, no hay elección
el vaso medio lleno, tomá que hay otra vuelta
vacío no cuenta, dejalo girar, pago yo.
No voltees, no camines para atrás,
cemento engañoso, no voltees
al revés no podes caminar.
Gritale fuerte que no haga que no escucha,
mentile que podes, cambiale el alfil
ganale como sea, la vida es terca.
Gritaaaaaaaaaaale!

domingo, 20 de marzo de 2011

Laughter.



Me gusta cuando pasan quince minutos y no paramos de reir,
gritar sin razón y todos al mismo tiempo.
Que colgarse es prácticamente una regla,
que siempre llego media hora tarde.
Me gusta que todos seamos diferentes
y tengamos muy poco en común,
pero aún así tengamos todo en común.
Amo reir, sin prejuicios. Amo reir con ustedes.

domingo, 13 de marzo de 2011

One love, one heart.

Un corazón, un amor que todos usamos.
Logro sentirme bien sin mirar al cielo
y vuelvo a caer cada tanto, casi cada luna completa.
No aprendí mucho más con vos,
solo aprendí a ser mucho más yo,
más grande y transparente que antes
y bastante menos amante.
Indiferente con los engaños
y engañosa, egoísta… sin necesidad.
Cuentos y dichos que tu boca me quiere pesar,
sin sorprenderme, sin ser víctima
no puedo engañarte, dije cuidarte de mi
mentiras, solo lo quise todo.
Ya no quiero ni el deseo que sabes, me puede
me endurece creerte vil y sonriente
pero no hemos crecido más que en días, otro ser.
Me burlo y no creo de todos amar,
Se como engañar, pude hasta un propio hermano,
pero nadie estuvo en mis pies
y solo yo puedo creerte que nadie jamás entenderá.
Si las monedas son mágicas y nos dan una oportunidad,
que en el agua se cumpla mis deseos,
que mis palabras te lleven lejos, más allá del mar.

lunes, 31 de enero de 2011

El zaguán es una zona neutral.

Primero una charla,
Unas cuantas palabras no del todo ciertas
y un interés engañoso.
Aparecen como personajes de un cuento mezclado con realidad:
un inventor de historias y un comprador que finge credibilidad.
Después de un apretón de manos, solo queda ir por más.
Sorprendentemente no cualquier inventor puede lograr su cometido,
pese a la predisposición mutua…

¿Quién sabe como funciona?
O como simplemente no funciona…


Esas son cosas que a todos nos ha pasado y no puedo explicar.
Pero si es así, aparece la ilusión, esas pavadas mentirosamente tiernas
O bien la fuerza animal consensuada... dos opuestos, a causa de infinidades de factores, que hoy no contaré.
Y ahí sucede la mayor rareza humana:
de la puerta en adelante, no hay reglas.

jueves, 27 de enero de 2011

Sonreir.

Alguna vez alguien pidió que se tomara una foto,
para poder recordar los tiempos felices.
Plasmarlos para no olvidar que vivimos,
que seguimos viviendo, que a pesar de todo, prevalecemos.
Yo creo que hay que escribir,
para contar que se es feliz.


No necesitamos hacer un libro,
con miles de palabras in
entendibles.
Con unas líneas alcanza, alcanza para contar.
Hoy no necesito más que lo que soy.
Hoy dejé atrás los prejuicios y la preocupación.
Puedo caminar y vivir, sin ataduras.
Puedo contar que tengo cosas hermosas y únicas.
Agradezco a quien quiera que me permitió tenerlas.
Por el camino, con mi guitarra, compañeros y mi voz.
Por el camino con el sol brillante,
por el camino que queda andar,
por el camino voy, sin dolor.

miércoles, 19 de enero de 2011

Solo un poco más

¿Qué es lo que uno intenta cuando se enfrenta a una hoja en blanco?
Ya casi nunca es una hoja de papel, sino una hoja virtual de esas que no se ponen amarillas con el timpo, ni le hacemos correcciones, ni están escritas por todo lados con ideas, con pasajes, canciones que queremos recordar o simplemente frases para otra nueva hoja, que también se pondrá amarilla.
Ya casi nunca volvemos a los libros, esos autores que nos dan felicidad, miedo o tristeza. A un Aleph, un quijote, un tunel, un cuarto sin salida. Creo que era la mejor literatura, cuando no había televisión o Internet. Cuando se leía un libro para pasar el rato o se jugaba con los amigos del barrio al “Carnaval”, como le dice mi vieja. Ahora se juntan a jugar al “Cunter strike” comiendo papitas “Lays” y tomando “Coca-cola”… ¡Ojo! Debo decir que lo de las papitas y la coca cola no me disgusta, porque generalmente me gusta hacerlo con mis amigos, pero prefiero escuchar música, tocar música o ver una película. No una película que esperas que sea una cosa y termina siendo otro factor comercial de un amor que no existe, ni refleja la realidad, ni siquiera se acerca a ser una realidad alternativa. Y la gente va por la vida creyendo que así será, que va a aparecer un príncipe azul en un auto cero kilómetro, que no te va a cuernear con la primera que también quiera a tu príncipe azul y que vas a tener hijos perfectos, ni un problema económico, ni nada remotamente parecido.
Por eso me gusta Shrek y Los Simpsons.
Realmente no se a que iba cuando me desvié en las estúpidas películas comerciales que nos comimos el otro día con unos amigos (no vuelvo a elegir más una película por el título).
En fin, volvamos a las páginas, a los libros, a los juegos de cartas, al truco, a las tortafritas, a los regalos de cumpleaños, a los abrazos sinceros, a los amigos sinceros, a la música que tan feliz nos hace. A tocar un acorde, a soñar con un escenario, a mantenerse en un escenario y darles a los espectadores un poco de lo que la música nos da. Esa sensación de que somos plenamente felices cuando entonamos, algo aunque sea con la guitarra vieja de mi abuelo, con la que me enseñó a cantar. Volvamos a las miradas, volvamos a la risa sincera, a la verdad cruda como siempre fue. Volvamos a escuchar. Volvamos a sentir.
Y parece una parodia media absurda utilizar este medio para escribir y no una hoja de papel, como dije al principio. Pero el avance tecnológico nos llega a todos y hay que reconocer que facilita la comunicación. Creo que es más que nada eso. Aunque prefiero unos mates y una charla en el patio de casa. De todas formas, tengo miles de hojas amarillas con mi letra. No crean que no, lo que estoy escribiendo, no es nada nuevo.